Esguinces
Un esguince se produce por la distensión o estiramiento de un ligamento (tejido que une los extremos óseos) que va más alla de los limites fisiológicos.
Los esguinces cursan con dolor, inflamación e impotencia funcional. Normalmente se producen por caídas o traumatismos, aunque también por sobreentrenamiento, por falta de propiocepción o sobercarga de los tejidos.
El tiempo de recuperación de un ligamento varía dependiendo del ligamento lesionado, la gravedad y tiempo de lesión. Hay que tener en cuenta que los ligamentos presentan un tiempo de recuperación mayor al tiempo de recuperación muscular.
Los ligamentos actúan mecanicamente como protectores de la articulación, aunque una de sus principales funciones es la de actuar como sensores que reconocen las distintas posiciones en las que se encuentra la articulación, previniendo de posibles lesiones ante traumatismos.
El tratamiento mediante la fisioterpia consiste en:
- Ayudar a controlar la inflamación.
- Reestablecer el tono de la musculatura que rodea a la lesión.
- Reestablecer la propiocepción de la articulación para evitar posibles recaídas.